viernes, 4 de septiembre de 2009

Desayuno galletas Pims que mi listísima y querida madre me metió en la maleta sin yo saberlo, a partir de ahora comeré una copia barata que he comprado de esas galletas porque aquí también las venden pero son muy caras. Ducha y salgo para la universidad que está más vacía que un pueblo fantasma del Oeste. Me encuentro de nuevo con Catherine y conozco a Bil. Ella de nuevo es encantadora y él también, encima es un cachondo que te cagas, no para de hacer bromas que agradezco, como que revise bien mis recuerdos a ver si estoy casado y no lo sé, que necesito llevar tatuajes para que me den el certificado de escolarización o que va a falsificar todos mis documentos en cuanto pueda. Catherine me ayuda con el papeleo y él con las conversaciones con la residencia porque es lo típico, los de la residencia piden papeles del banco y los del banco piden papeles de la residencia, menos mal que ellos se encargan. Bil me da un par de consejos sobre los alrededores de mi zona, autobuses, etc... Me voy a comer un bocadillo con Catherine, cuando estamos a solas me pide que le hable en español, ella me habla todo el rato en francés salvo cuando no entiendo algo que cambia al inglés. Me da una vuelta por la parte vieja de Villejuif, que es el pueblo donde está la universidad, algo así como Leganés para Madrid. Pero claro, aquí a la vuelta de la esquina te encuentras iglesias góticas, es la juerga padre. Me enseña un parque donde comeremos después, un teatro donde habrá una representación para que vayamos los de la universidad, un par de boulangeries y algunas callejuelas. Hace sol, compramos un bocata de atún con ensalada, yo también añado al menú una especie de bollo que es como los pasteles típicos de crema o chocolate pero tamaño gargantuesco. Nos comemos el bocata sentados en el bonito parque al Sol hasta que nos espanta una avispa y las prisas porque hemos quedado para hablar con un profesor. Me dice que su niñera era española y que hasta los cuatro años ella hablaba español pero que luego lo olvidó hasta que un día fue a España de joven y sin saber por qué, entendía casi todo, sus padres le contaron el motivo. Casi no habla porque no tienen ninguna práctica y costumbre, yo intento ser recíproco y hablar sin palabras complicadas, con claridad y despacio. Hablamos ligaremante de París, su arquitectura, historia, hablamos de los respectivos "cinturones rojos" alrededor de nuestras dos capitales y cómo ya poco a poco lo son cada vez menos. En caso de París el principal motivo es que lo está invadiendo la clase media, la clase baja se tiene que ir aún más lejos, París es directamente una locura y hay que tener mucha pasta para permitirse un apartamento. Ayer ya me di cuenta de que creo que tiene una pierna ortopédica, no sé si entera pero sí algo, va un poco coja pero casi no se nota, yo porque me fijo en lugares raros. La verdad es que me parece una mujer encantadora, risueña y llena de energía.

Escuchando: Byther Smith - I am a Mad Man

Vamos a hablar con el profesor, otro de los encargados de los proyectos. Le digo que prefiero hacerlo más sobre temas de seguridad que sobre redes, que también pero más enfocado a ese aspecto. Tengo hasta el día 19 para elegir proyecto, al menos me dice que propondrán una lista. El proyecto se puede hacer hasta entre cuatro personas, así luego no los aceptan en la UPM, no me extraña. Lo horroroso es que no recuerdo los nombres de los profesores, si ya soy malo para los nombres en español, para los nombres en francés ya es el absurdo, el del tío de ayer me lo habrán dicho fácil diez veces y ya no me acuerdo. El lunes pediré a Catherine o alguien que me los escriba para estudiarmelos, qué triste.

Vuelvo a casa y dejo la mochila y la carpeta. Me tumbo y me quedo sopa no sé cuánto tiempo pero no creo que más de media hora cuando me despiertan los de mantenimiento para traerme mi papelera y mi banqueta. Voy al supermercado que hay aquí y compro comida ¡por fin! y cosas básica de higiene y hogar (63,37€), me han dicho que esta cadena, Franprix, es bastante barata y salvo una caja de té y algunas cosas como Nesquick o Nescafé, todo lo que puedo lo compro de "¡Promoción!". Vuelvo cargadísimo a casa y menos mal que un tío muy amable (que vive en el 2º) me abre las puertas de abajo. Me zampo el bollo de postre que compré y bebo de la botella de leche, qué placer, madre mía, mientras empiezo a ver el primer capítulo de The Wire. El horror, la serie tiene pintaca pero usan jerga a muerte y los subtítulos están en inglés y no tengo Internet para buscar palabras. El caso es pasarme la vida sin entender nada de lo que escucho, qué cruz. Me voy a dar un paseo, por fin, siguiendo la linea de metro, un par de paradas hasta la Place d'Italie donde Bil me dijo que había un Carrefour. Me compro un plato, un vaso, un bol, una sartén, una cacerola, papel blanco, papel celo y champú, que se me había olvidado. (62,05€). Vaya sangría de pasta. Encima me cobran las bolsas, se lo pregunto en inglés a un chaval que tenía detrás en la cola y ya es demasiado tarde para ir a por una de las tochas de tela. Y yo que me quiero comprar un miniflexo porque lo de la luz arriba es horrible, por ejemplo ahora mismo son casi las nueve de la noche y lo echo de menos, prefiero estar solamente con el ordenador y no con la luz de arriba.

Voy a contar la pasta que me queda y además mañana iré a sacar dinero, si puedo, de la cuenta de España porque como creo que ya conté, la puta Visa Electrón no sirve para nada. Mañana tengo que ir a comprar un estropajo y utensilios de cocina como una cuchara de madera o dos, sal, y algo para dar la vuelta a los filetes, a ver si por fin como en condiciones mañana porque ahora me zamparé el pepito que traje de casa que está en la nevera desde que llegué. Tengo que comprar huevos. Después a ver si hago alguna excursión gratuita como ir al cementerio de Pere-Lachaise a ver a Jim y otros tantos y cagarme en la puta un poco tranquilamente que estos días lo hago cada cinco minutos pero sin parar de hacer cosas. A ver si me llama alguno de la pandilla para dar un voltio, también. Pues eso, hasta que me acueste me voy a pasar el tiempo viendo series en inglés. Es horrible cuando dices algo en voz alta y te sale en un idioma que no es el tuyo. Pues eso me pasa y a veces pienso un poco en inglés, a veces me salen en la cabeza cosas en francés, penosamente, por la boca aún no me sale nada de francés salvo, esto es importante, saludar a la gente. Estoy hasta los huevos de la alegría saludil de los franceses, se saludan todo el rato joder, que igual en España es igual y no me doy cuenta pero aquí estoy hasta los cojones de decirle Bon Jour hasta al último mono y en la residencia en cuanto bajo o cojo el ascensor todo el rato. Al menos uno me ha dicho ¡oh, escuchas Michael Jackson, eso mola! Lo que me recuerda que a la salida del Centre Comerciale de la Place d'Italie donde estaba el Carrefour he sido testigo de algo grotesco. Un viejo, que iba vestido más o menos decentemente, con dos carros de supermercado donde llevaba cuatro cacharros y unos altavoces bailaba una canción de Jackson de forma triste y horrible, parecía el gogó del DUOM.

Me duele la espalda, el puto colchón no es horrible pero tampoco es maravilloso así que o me pasaré el año con dolor de espalda, o acabaré paralítico o me acostumbraré y algún día se me pasará. Estoy por dormir un día en el suelo, necesito algo más duro que esto porque aaaaayyyyy.

Y el wifi en el Hall como prontííísimo el lunes por la tarde. Sic.

Escuchando:Bessie Smith - The Collection 1923 - 1933. Para el que no la conozca fue la preLady Day en los años 20 donde aún pegaba más el blues vocal que el jazz vocal. Maravillosa, decadente, oscura, deliciosa. Por Internet se puede encontrar una especie de corto donde sale ella cantando con una botella de algo en plan borracha.
Gasto: 130 €
Gasto Acumulado: 188 €

2 comentarios:

  1. Eres un asocial de palo hasta en un país que no es el tuyo. Acabas de llegar y, ¡tienes "pandilla"! XD

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  2. No es una pandilla, es la asociación Internacional de la universidad que se encarga de recibir a los alumnos extranjeros. Lo que pasa es que aquí las asociaciones son infinitamente más activas que en mi universidad y además esa gente estas semanas no ha tenido clase, empiezan el lunes. A partir de entonces ya cada uno irá más por su lado.

    No tengo pandilla, soy un marginado social.

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